Alfex es una propuesta para atrevidos. El diseño moderno combinado con el uso de mecanismos de alta gama da como resultado productos poco convencionales, hechos a medida de personas elegantes a las que les gusta destacar entre la multitud. Cualquier persona con un estilo inusual y a la que le gusten los accesorios fuera de lo común adorará los productos de la marca.
Los orígenes de la fabricación de Alfex se remontan a finales de la década de 1950, cuando se estableció la primera fábrica en la ciudad suiza de Lugano. Cabe destacar que en la década de 1960, Alfex se unió a marcas tan conocidas como Tissot y Omega, mediante una fusión con el Grupo SSIH (Société Suisse pour l'Industrie Horlogère SA, hoy conocido como Grupo Swatch). El matrimonio conjunto duró poco, pues ya en 1974 Alfex se separó y empezó a funcionar como empresa independiente con el objetivo de crear relojes de moda únicos.
Con sus aplicaciones de diseño poco convencionales, Alfex se ha establecido como una empresa que va contracorriente y marca tendencia entre los relojes. Una figura que ha influido significativamente en la forma de la marca es George Plum, un diseñador de renombre mundial. Gracias a él, entre otros, los relojes Alfex han ganado aclamados premios en el mundo del diseño aplicado: Red Dot y Good Design.
Las raíces suizas de la marca Alfex la obligan a cumplir los estrictos requisitos que conlleva el distintivo "Swiss Made". Esta designación es garantía de mecanismos de alta calidad: en relojes de cuarzo: ETA y Ronda; en relojes automáticos: ETA Valjoux; en modelos de cuerda manual: Unitas. Dato interesante: el patrón de la serie de relojes de cuerda mecánica es el campeón olímpico de esquí alpino Bernhard Russi. También es la precisión suiza y la atención a cada detalle lo que, en última instancia, se traduce en un producto de alta calidad, poco convencional y a menudo extravagante.